La escasez de envases de un solo uso a consecuencia de la carencia de materias primas, la problemática del transporte y la fuerte demanda de la restauración, ponen en jaque a los profesionales del sector. La disponibilidad pasa a ser la variable fundamental que domina el mercado por encima del precio.
El servicio de Delivery y Take-Away se ha triplicado en España en estos dos últimos años, según el último informe elaborado por Delectatech realizado tras analizar los resultados de más de 250.000 establecimientos Horeca. Esta situación ha disparado la comercialización de envases que son imprescindibles para el reparto de comida a domicilio. Tal es así, que el mercado de menaje monouso en la restauración de Delivery Take-Away mueve por encima de 600 millones de euros anuales, experimentando tasas de crecimiento de dos dígitos en los dos últimos años.
Papel y plásticos en sus diferentes versiones (cartoncillo, cartón microcanal, incluido también bagazo y los diversos tipos de plástico como PP, rPET, PS, PLA) son las principales materias primas que intervienen en la fabricación de estos envases, sin olvidarnos del aluminio.
La falta de papel se debe en gran medida al brutal incremento de la demanda de bandejas para el envasado de frutas y otros perecederos que se comercializan en los supermercados y que se ve impulsado por la tendencia del mercado a materiales sostenibles. Igualmente, el enorme aumento de consumo de cajas para paquetería que se utilizan en el comercio electrónico es también un factor clave.
Demanda muy superior a la oferta
A nivel de materia prima, estas variables obligan a los productores de papel a trabajar por cupos de producción con sus clientes. Entre ellos, los de la industria transformadora de envases que además también están en fuerte crecimiento.
Por otro lado, tenemos el plástico que se ve directamente influenciado por el petróleo. Y lo mismo sucede con el aluminio, tras la decisión de China de reducir su producción en base a su plan de reducción de emisiones de carbono.
Transporte y energía
Si a esta falta de materia prima le añadimos la problemática del transporte y energía, resulta la tormenta perfecta. La consecuencia es la dilatación de los plazos de entrega y la realización de producciones de envases sin rentabilidad, todo ello debido al notable incremento del crudo, del gas y a la congestión de contenedores marítimos (principalmente en China y ahora Turquía) disponibles para el comercio internacional.
El sector del envase espera que continue este escenario de dificultad de acceso a la materia prima, así como que sigan aumentando los costes hasta finalizar el verano de este año. No obstante, las previsiones dicen que de cara a final de año se alcanzará el equilibrio en la oferta-demanda del papel y plástico y que se recuperará cierta estabilidad a nivel de precios.
“En estos momentos tan excepcionales, la disponibilidad de producto es nuestra máxima prioridad”, afirma José Luis Martín, Director de Food Service Packaging de Bunzl Distribution Spain.
La respuesta de Greensource
Por nuestra parte, en la gama de envases Greensource estamos aumentando los lotes de producción, lo que nos permite fabricar más cantidad de producto. De esta manera conseguimos elevar nuestros niveles de stock de seguridad con el fin de responder a las posibles subidas de demanda por parte de nuestros clientes.
Y es que en estos momentos tan excepcionales, la disponibilidad de producto es nuestra máxima prioridad.
Bunzl Distribution Spain
Director Food Service Packaging